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El Concurso de Estudiantes y Jóvenes Profesionales de Arquitectura Paisajista de IFLA Europa brinda la oportunidad a estudiantes y jóvenes profesionales de compartir sus proyectos e ideas entre IFLA Europa, sus miembros (34 Asociaciones Nacionales) y profesionales de la arquitectura paisajista de toda Europa.  El concurso tiene como objetivo ayudar a los estudiantes de arquitectura paisajista y a los jóvenes profesionales a exponer sus proyectos y trabajos. Cualquier estudiante europeo de arquitectura del paisaje inscrito en el programa de Arquitectura del Paisaje Europeo o un profesional menor de 35 años, que sea miembro de cualquiera de las Asociaciones Nacionales de IFLA Europa, puede presentar su proyecto. 

El tema del Concurso 2023 es ‘Paisajes perdidos’.   Mirando la transformación de los paisajes en los últimos años, no podemos ignorar cómo la velocidad de la dinámica que la provocó, está experimentando una nueva y fuerte aceleración.  Los científicos, investigadores y académicos describen el mundo actual como fuera de control, donde las crisis ambientales, económicas y de identidad están interconectadas; si bien sus dimensiones son globales, se perciben localmente, afectando profundamente a los lugares y paisajes que son su expresión.

Los paisajes, es bien sabido, están en constante evolución. Sin embargo, a veces, tales transformaciones ocurren de manera inapropiada, a pesar de sus reglas constitutivas, de manera homogeneizadora, causando rasgaduras y cicatrices inconsistentes, por lo que pierden su reconocibilidad. «¿Hemos perdido nuestros paisajes?» se pregunta el filósofo Venturi Ferriolo. Esta pregunta no es trivial, y no es tan importante responderla como desencadenar nuevas acciones y procesos para «(…) salvar las especificidades locales, a menudo ya no lo suficientemente reconocibles como para recuperar una identidad moribunda»  ( M. Venturi Ferriolo , Paisajes  en movimiento: por una estética de la transformación , 2016).

El problema de la identidad es crucial: no existe una única identidad para un paisaje sino múltiples, y estas están ligadas a la percepción social. Además, lo que consideramos identidad es a menudo el resultado de un proceso de ‘filiación inversa’, según el cual, «(…) No es el pasado el que produce el presente, sino el presente el que configura su pasado». (M. Bettini, Te has  equivocado de bosque. La furia de la identidad , 2020).

El paisaje es la «puerta» para entrar en esa dimensión en la que memoria e imaginación se encuentran para dar a luz algo nuevo: un proceso de diseño que se alimenta de una «memoria operativa» (ver. ‘Paisajes Perdidos’) para nutrir su carácter performativo, lejos de nostalgia y lamento de lo perdido.

Abrir una reflexión sobre cómo los paisajes cambian o se convierten en otra cosa cortando el hilo que los une a su origen, soltando algo, perdiendo caracteres y significados y, en ocasiones, adquiriendo otros nuevos, conlleva la necesaria consideración de la arquitectura del paisaje como la actitud de diseño más capaz de interpretar las condiciones del ‘hábitat contemporáneo’.

La Arquitectura del Paisaje debe convertirse en el cambio de juego, esencial no solo para consolidar, reconstruir y prácticamente conformar los sistemas ecológicos de la Tierra, sino para contribuir de manera decisiva a la transformación de la forma en que habitamos, producimos y atravesamos nuestros paisajes.

Su tarea es ser un negociador entre la naturaleza y la cultura, entre la innovación tecnológica, la ecología y la imaginación poética, para desempeñar un papel decisivo en la reconstrucción del sentido y el valor de nuestra relación con la Tierra.

La Arquitectura del Paisaje es una práctica crítica, una condición en la que el diseño se convierte en acción; es una forma de pensar y actuar combinada. Expresa una competencia profesional capaz de remodelar entornos de vida a través de complejos procesos de transición.

Corresponde al Arquitecto Paisajista realizar una acción de verdad, de traer de vuelta la problemática del proyecto con plena conciencia de cada uno de sus aspectos: configurativo, social y ambiental.

El campo de acción del proyecto de paisaje se refiere cada vez más a los paisajes de la vida cotidiana. Aquellos donde las comunidades viven, trabajan y transitan. Los paisajes donde es necesario metabolizar las principales transformaciones inducidas por el hombre, incluidas las relacionadas con los problemas ambientales emergentes. La jornada ‘Paisajes Perdidos’ pretende activar una mesa de debate en la que puntos de vista, líneas de investigación y prácticas de la arquitectura del paisaje puedan confrontarse en torno a determinadas capacidades del proyecto que se ponen en tensión con tres ejes temáticos, pero también aquellas paisajes que tienen la característica de no ser identificados por connotaciones geográficas o tipológicas precisas.

Paisajes habitados

Se habita un paisaje cuando se participa de los intercambios que lo hacen intensivo. Hay una ambigüedad fundacional y fértil en los paisajes habitables. Esta ambigüedad reside en la dimensión suspendida entre la ciudad y el campo, la urbanidad y el interior. Se trata de nuevas características, ya no rurales ni naturales pero tampoco propiamente urbanas, marcadas por una alternancia, una superposición y sobre todo una co-presencia inconsistente de estos estados.

Es sobre estos temas que la actitud contemporánea del paisaje revela su potencial a través del poder de reescritura, de actuar en redes por puntos y sistemas, de asumir la incompletud y la discontinuidad como parte del resultado.

Estos contextos a menudo se convierten en «reservas» de biodiversidad y (considerando los nuevos desafíos climáticos y sociales) pueden estimular una nueva consideración de los espacios abiertos de la ciudad, vistos ya no como fragmentos, sino como un «sistema», significativo y significativo a nivel metropolitano y escala territorial, a la espera de nuevas oportunidades de reconocimiento, revitalización y regeneración que pudieran surgir de estrategias integradas de conservación, gestión e innovación.

Paisajes de Producción

Un objetivo importante del Arquitecto Paisajista es diseñar paisajes productivos que sean resilientes y capaces de proporcionar tantos servicios ecosistémicos como sea posible, comenzando con una colaboración con los actores que los implementarán, en primer lugar, las comunidades que viven y producen allí. Tal complejidad no puede resolverse simplemente reemplazando un paisaje preexistente como el paisaje rural, por un paisaje monofuncional como el agroindustrial, o el turismo de masas o los paisajes energéticos. Sobre todo porque cada vez que fuertes intereses económicos han afectado las áreas rurales, las comunidades se han alejado de ellas y con ellas los conocimientos, materiales, culturas y lazos ancestrales que habían creado esos mismos paisajes en primer lugar. Entonces, ¿cómo lograr introducir innovaciones sin despoblar y desertificar,pero en lugar de animarlo con nuevas funciones?

Paisajes de cruce

Las redes y relaciones ecológicas, infraestructurales, de asentamiento, perceptivas, sociales y económicas estructuran el paisaje. Vínculos que no son sólo físicos, sino también intangibles, evidentes no sólo en el presente sino también como huellas de una memoria que se proyecta hacia el futuro. Redes que atraviesan y describen paisajes, conectando lugares de vida (carreteras y rutas para la movilidad blanda, ‘greenways’, ‘blueways’, etc.) cuya dimensión intangible es el diseño poético-clave para crear nuevas formas de disfrute activo y dinámico del paisaje (es decir, rutas del vino y del sabor, itinerarios histórico-culturales, etc.).

El proyecto de diseño del cruce de paisajes y el proyecto de diseño de los paisajes cruzados, se convierten en una sola narrativa que conecta historias y geografías. Los paisajes de cruce son los lugares donde se manifiesta el valor material y táctil de las relaciones, pero que también emerge por su capacidad de narrar el espacio y el tiempo, testimoniando la centralidad del diseño del paisaje para construir una narrativa contemporánea que mantenga un hilo conductor con el pasado.

13 de Junio: Fecha límite para enviar las inscripciones. Información detallada sobre reglas de participación, en el siguiente ENLACE 

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