El programa, centrado en la difusión del patrimonio histórico y botánico de jardines de España, que emite La 2 de RTVE, presentado por la historiadora y paisajista Mónica Luengo, ofrecerá el sábado 11 de mayo, el 4º capítulo de su Cuarta Temporada, con un recorrido por el Jardín de L’Albarda de Alicante
Enmarcado por el azul del Mediterráneo, y el macizo del Montgó , fue creado en los años 90 por el ingeniero valenciano Enrique Montoliu. En este jardín privado de autor decidió construir su residencia de verano, inspirada en las villas neoclásicas, y rodeada de jardines de estilo renacentista
Este enclave natural, ejemplo de la diversidad paisajística de esta zona del Mediterráneo, ocupa cincuenta mil metros cuadrados situados a pocos kilómetros del Parque Natural del Montgó, entre los municipios alicantinos de Denia y Jávea, en el término municipal de Pedreguer, en la comarca de la Marina Alta
Microclima. Es la presencia junto al mar del Montgó, un macizo con 753 metros de altura, lo que brinda a este parque de L’Albarda un entono climático privilegiado debido a que “ejerce gran influencia sobre los vientos de la zona, que desplazan las nubes hasta aquí, provocando que este sea uno de los lugares más húmedos de la Comunidad Valenciana”,
Flora autóctona. Como refiere Luengo en el inicio del episodio, estamos frente a “un auténtico santuario de la flora mediterránea”. El jardín está dividido en cuatro áreas de diversa índole: jardín valenciano, jardín formal, bosque mediterráneo y jardín paisajístico. En él crecen palmeras, magnolios, dragos, naranjos, tejos, cipreses y los setos de mirto o arrayán, planta autóctona muy presente en las tradiciones locales. Junto al laurel, constituyen solamente dos ejemplos del total de 700 plantas autóctonas que atesora este jardín, muchas endémicas. No en vano, el Jardín de L’Albarda se considera hoy un ejemplo de la flora alicantina.
Romanos y árabes. Una de las peculiaridades de este jardín es la parra virgen, revestimiento natural de la fachada cuyas hojas refrescan la vivienda y la integran en el verdor circundante. La pasa de Denia se obtiene de la variedad de uva moscatel, de gran dulzor y, aunque introducida por los romanos, se debe a los árabes su aprovechamiento dejando los frutos al sol. Fue en el s. XIX cuando esta localidad vivió el esplendor de la comercialización de la uva pasa por Europa.
Los invitados del episodio serán en esta ocasión, el propio Enrique Montoliu, fundador en 1996 de la fundación homónima, pionera en el mecenazgo natural en España, que habla de durillo o viburnum como la planta que más identifica a esta entidad sin ánimo de lucro; Nicolau Puigcerver, educador ambiental, que explica cómo Montoliu creó un bosque mediterráneo convertido en barrera vegetal que atrae a insectos y fauna; y, el antropólogo y filósofo Santiago Beruete -autor del libro Jardinosofía-, que comenta cómo “todos los jardines formulan una teoría estética de la belleza o una teoría ética de la felicidad” y aboga por el jardín como terapia filosófica