Imagen: Jardín de Barcelona. Shutterstock / Valeri Luzina

La Asociación Española de Paisajistas, se ha adherido al MANIFIESTO firmado por un total de 24 entidades de toda España , en el que exigen que «se garantice el uso del agua para el riego de supervivencia de jardines y zonas verdes, tanto de carácter público como privado, en caso de declararse el escenario de emergencia en Cataluña,

En el citado documento, declaran la importancia y los beneficios que el mantenimiento de los espacios verdes tiene en la conservación del medio ambiente, la biodiversidad y la salud física y mental de la ciudadanía, evidenciando  que el verde de municipios y jardines es acción climática positiva.

En este sentido, el Manifiesto señala la defensa que «el sector del verde, que en los últimos 30 años  ha impulsado la construcción de jardines con criterios de sostenibilidad, de optimización de los procesos productivos y, muy especialmente, de la gestión del agua como recurso imprescindible y escaso, no se puede permitir volver a sufrir la aplicación de medidas que reviertan en la viabilidad económica de las empresas y las personas trabajadoras que forman parte.

El Manifiesto que se ha difundido a diferentes medios de comunicación, está impulsado por la Fundació de la Jardineria i el Paisatge, dirigida por David M. Gómez  «En 2008 ya tuvimos problemas. Ahora necesitamos que los dirigentes organicen un buen plan para ahorrar agua que no pase por sacrificar estos espacios verdes esenciales. Y necesitamos que se apruebe oficialmente el matiz que permita seguir salvando a los árboles».

«Es indispensable mantener el riego de supervivencia en las zonas verdes públicas y privadas», afirma. ¿Y por qué lo defienden también en zonas privadas? «Son pequeños oasis de biodiversidad». «Europa está poniendo el foco en la importancia de mantener infraestructuras verdes. Perderlas va en la línea contraria y hace peligrar el bienestar de las personas en pueblos y ciudades». En concreto, los fondos Next Generation han apoyado con más de 500 millones de euros la restauración de ecosistemas y infraestructuras verdes.

El reto es conseguir que este riego que reclama el sector no se realice con agua potable. Ahora, en Barcelona, por ejemplo, se usa agua del grifo para el 80% de la superficie regada. «Es evidente que se han optimizado los procesos y se ha mejorado en la gestión del agua, pero todavía hay margen para buscar fuentes alternativas que eviten el uso de agua potable en plena sequía», reconoce Gómez

Fuente: El Periódico. Guillem Costa

 

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies